Regionales-, Manantiales Behr será la única que mantendrá en Chubut y Palermo Aike, que está ubicada la Cuenca Austral, en Santa Cruz. Son trece las áreas que pasarán a manos de nuevos operadores. Las conversaciones avanzan, aunque restan acordar “detalles”, como valores y pasivos ambientales.
YPF entregará las áreas de Chubut y Santa Cruz en el segundo semestre
“Manantiales Behr es invendible, produce 4.000 metros cúbicos de crudo por día. Nadie va a venir a poner cientos de millones de dólares” para quedarse con el yacimiento. La frase, pronunciada por un alto ejecutivo de la petrolera con mayoría estatal, va en consonancia con lo conversado entre los gobernadores y sindicatos de la región patagónica con el presidente de YPF, Horacio Marín.
Las negociaciones para que la empresa se desprenda de las áreas de baja producción en Chubut y Santa Cruz avanzan a buen ritmo. Tanto es así que desde la compañía proyectan concluir el proceso en el segundo semestre de este año.
“Cuanto antes se haga, mejor. No tiene que haber incertidumbre”, agregó la fuente empresaria, pero alertó: “hay tiempos, procesos que cumplir; hay que hacerlo bien, con transparencia; hay que hacerlo de forma que cualquier accionista que quiera ver el proceso diga que fue correcto y eso lleva su tiempo”.
En la parte chubutense de la Cuenca del Golfo San Jorge, YPF explota cuatro yacimientos: Manantiales Behr, Campamento Central-Cañadón Perdido, Escalante-Trébol y Restinga Alí.
En tanto, en la de Santa Cruz tiene a su cargo Barranca Yankowsky, Cañadón de La Escondida-Las Heras, Cañadon León-Meseta Espinosa, Cañadón Vasco, Cañadón Yatel, Cerro Piedra-Cerro Guadal Norte, El Guadal-Lomas del Cuy, Los Monos, Los Perales-Las Mesetas y Pico Truncado-El Cordón. Todas ellas registraron caídas del orden del 50% en su producción en los últimos diez años.
Entre las dos provincias suman 14 yacimientos. Menos Manantiales Behr, los restantes dejarán de ser operados por la compañía.
Hasta que el traspaso se concrete, desde YPF aseguran que “mantendremos la paz social; no tiene que haber preocupación en ese sentido, no vamos a dejar a nadie en la calle. Seguiremos operando a pérdida, como hasta ahora”.
Y estiman que no habrá mayores inconvenientes en el futuro ya que las empresas que operan en la Cuenca son especialistas en la explotación de yacimientos de convencionales maduros, por lo que “les va a ir muy bien”.
COTIZACIONES Y PASIVO AMBIENTAL
Este camino no estará exento de análisis y discusiones. Por un lado, la mirada está puesta en la cotización que la petrolera establecerá sobre cada uno de los yacimientos; y, por otro, en el mecanismo que utilizará para desprenderse de esos activos. Y un tema no menor que inquieta a los gobernadores e intendentes –como Othar Macharashvilli, por ejemplo-: el pasivo ambiental.
Respecto al valor de cada área, YPF contrató hace un tiempo a una compañía internacional especialista en estos temas que establecerá la cotización de cada yacimiento.
En este sentido tendrá especial importancia la producción de cada uno. Según datos de la Secretaría de Energía de la Nación, en diciembre de 2023 Campamento Central produjo 15.000 metros cúbicos, un 50% menos que hace diez años. En El Trébol la producción fue de 36.700 metros cúbicos en el último mes del año pasado.
En este sentido, desde YPF aseguran que “cualquiera de las compañías que se haga cargo de las áreas va a lograr mejores resultados que nosotros porque en el golfo San Jorge YPF tiene costos operativos muy altos. Cuando las áreas son maduras, las grandes empresas son ineficientes”.
Otro punto bajo estudio es si habrá reversión de áreas (devolución a cada Estado Provincial), venta entre privados o un modelo mixto. Los gobernadores están esperanzados en que sea a través de una reversión y que las provincias intervengan en el proceso de concesión de esos activos.
El pasivo ambiental parece, hasta el momento, el tema que más resquemores despierta. Existen infinidad de pozos sin sellar, y cientos que no han sido abandonados correctamente. Hacerlo representa un inversión de millones de dólares. Y el tema podría ser integrado a la negociación cuando se establezca la cotización de cada área.
El yacimiento Campamento Central podría ser el que más discusión despierte entre los negociadores ya que está ubicado en pleno casco urbano de Comodoro Rivadavia.
En ese sentido, fuentes de la petrolera detallaron que “el presidente Horacio Marín está trabajando provincia por provincia porque cada una tiene aristas distintas. En un principio se pensó que lo mejor era estar todos en la misma mesa, pero cada uno tiene una dinámica y realidad diferente. Entonces ahora será individual con cada uno”. (El Patagonico)