Pareja de Fabricio Sánchez, negó culpa y contó que era víctima de violencia de género

Las Heras-, Jéssica Dipiero era la novia de Fabricio Sánchez, quien se disparó luego de una discusión. La Justicia la citó a indagatoria después de tres años por posibles inconsistencias. “Si hubiese podido estar con él, habría intentado que no lo haga”, dijo a TiempoSur. Confirmó que asistirá a declarar y relató qué sucedió esa noche.

El 20 de mayo debe declarar Jéssica Dipiero.

Por primera vez ante un medio de comunicación, Jéssica Dipiero, oficial de Policía,   contó su versión sobre lo que sucedió el 15 de julio de 2016 en Las Heras, cuando luego de una discusión con su pareja, Fabricio Sánchez -también agente- se disparó.

Luego de tres años, la Justicia la imputó por lo que el próximo 20 de mayo –por orden del juez Guillermo Ghio- deberá declarar.

La madre y familia de Fabricio insisten en que no se pudo haber suicidado, además de falencias en la investigación  que marcó su asesora letrada que se incrementaron al advertir de que nunca se le realizó una autopsia, sumado a dos presuntos disparos y una pericia psicológica postmortem realizada a Fabricio, que concluyó que el joven no era capaz de suicidarse.

Jéssica vive en Río Gallegos desde hace dos años, la misma ciudad en la que conoció a Fabricio cuando juntos cursaban en la Escuela de Cadetes.

TS:-¿Qué es lo primero que te causa la citación?

JD:Sí, me voy a presentar. Quiero saber qué me quieren imputar. Yo me considero  inocente, obviamente. No me esperaba pasar una situación así. No voy a negar que teníamos problemas como pareja, pero nunca me imaginé que iba a terminar así. Iré a declarar y ver qué pruebas tienen en contra mía. Sinceramente no considero haber hecho nada para que él haya tomado esa decisión.

Pasé muchos conflictos con él, tengo testigos y mi familia que sabe cómo era él conmigo. Y tuve que superarlo y hasta hoy me cuesta superar todo lo que viví, pasé y sigo pasando. Muchos salieron a hablar de mí, sin realmente conocerme. La mayoría que trabajó conmigo sabe cómo era él y cómo soy yo. Soy una mujer de trabajar, de seguir adelante, pase lo que pase nunca bajé la frente. Siempre cuando tengo que dar la cara la voy a dar. Considero que no hice nada para que él tomara esa decisión y por eso la Justicia debe seguir investigando porque las pruebas están, siempre estuvieron, siempre se hicieron las diligencias correspondientes y voy a ir a decir lo que tenga que decir y nada más.

-¿Estabas al tanto de la pericia psicológica (post mortem) realizada que expuso que Fabricio era una persona  tímida que no podría haber tomado la decisión de suicidarse? También que los compañeros señalaron que tenías una personalidad conflictiva.

Los compañeros dicen lo que vieron de él. Pero ellos no saben que él a mí, en dos oportunidades, casi me mata. A mí me hicieron la pericia psicológica.

En una discusión que tuvimos, me dijo que me callara, me ahorcó y casi me mata. Yo grité y pedí auxilio y nadie me ayudó. En ese entonces fue mi mamá una semana a Las Heras a estar conmigo y él se volvió a Piedra Buena porque no quería estar más conmigo. Después volvimos a estar juntos.

Y en otra oportunidad volvió a pasar.

-¿No hiciste denuncias por violencia de género porque no te animaste?

No me animé a hacerlas. He sido víctima desde que estuvimos juntos. Yo no entiendo, por ejemplo, por qué la madre me echó la culpa a mí porque él dejó la Escuela de Cadetes. ¿Por qué no averigua realmente? La Escuela de Cadetes es una institución muy seria. Ahí trabajan de forma interdisciplinaria un montón de profesionales, como psicólogos. Y allí sabrá, porque antes de estar conmigo él estuvo con otras cadetes. También le hicieron un informe psicológico y hasta una propia instructora le había dicho que supuestamente se quería matar.

-¿Esos informes no los tuviste al alcance o trataste que la Justicia los tuviera?

No. La verdad no quise seguir. Me costó un montón… estuve bajo tratamiento psicológico y psiquiátrico en Buenos Aires. Nadie sabe el dolor que yo estoy pasando. Hay una cosa más: sea la Justicia o quien sea deben periciar mis contactos y mis cosas, que lo hagan. La hermana misma, el mismo día que falleció, no me dejó entrar al velatorio, echándome la culpa sin haber pruebas, sin haber pericias. Me echó la culpa que yo había matado a su hijo cuando no es así.

-¿Qué sucedió esa noche?

El salió del Casino a las 18:00. Yo estaba estudiando en Buenos Aires, estaba de receso invernal, habían finalizado las clases y me vine a verlo a él. Discutimos porque él se enojó porque había llegado tarde a buscarlo en el Casino. Yo andaba en el auto y andaba haciendo unos trámites para depositar la plata de la residencia universitaria. Estuve en mi casa, estuve limpiando, cocinando, porque él antes había salido de guardia a las 8:00, se durmió y las 11:00 ya se había levantado y se fue a las 12:00 al Casino hasta las 18:00, de adicional. A las 18:00 llegué y no estaba en el Casino. Lo encuentro en la calle, lo alzo y estaba nervioso, enojado y no me quería hablar. Llegamos a la casa y no me quería decir  qué era lo que le pasaba. Se preparó una taza de café, que fue lo que yo declaré…. se fue a sentar en la cama y yo fui a hablarle, no quiso hablar conmigo ¿Y qué hizo? Me tiró la taza de café caliente. Donde está eso de que tenía la ropa mojada? En fotos, si me sacaron fotos en el hecho tiene que estar….

Luego quise poner música y me dijo “vos no vas a hacer lo que quieras cuando yo estoy, cuando yo no esté poné música”. Y agarró el codificador de Direct TV y lo rompió. Agarró sus cosas y se va. Le pregunté adónde se iba y no me quiso decir. Me agarró y me empujó y yo llamé a la Comisaría.

-¿A la Comisaría?

Sí, al 101, porque tengo Claro y me da la Seccional Primera. Para esto me dicen que ya iban y fue que salí afuera, cierro la puerta, estaba parada al lado de la ventana y siento   una explosión en la ventana. No sé con qué rompió el vidrio de la ventana, no sé si fue un disparo, una piedra o con un objeto. Eso nunca se mencionó: de por qué estaba la ventana rota. Hay fotos.

-La abogada y madre dicen que rompiste el vidrio del auto para que él no se vaya.

Primero pasó eso (lo que contó antes). Después yo que estaba afuera, que él rompió el vidrio de la casa, que no sé si fue un disparo, porque encontraron dos vainas, o una encontraron y otra no, quiero saber que la Justicia averigüe y los padres quien rompió y porque rompió la ventana. A mí me salpicó el vidrio y me cortó el brazo derecho y cae sangre al frente de la casa, esa sangre era mía (la madre estima que era de Fabricio).

-No rompiste el auto con un piedrazo.

No, no impedí que se vaya… corrí una piedra (grande) que estaba al lado del camino, al lado de la puerta y cuando salgo la corro hacia un costado y él me empuja y ahí caigo hacia atrás y ahí rompí el vidrio del auto…. Luego ahí me senté en el auto y escuché el disparo.

-Estabas en el auto.

Estaba en el auto cuando escuché el disparo. Si hubiese podido estar con él, habría intentado que no lo haga. (Nota original: TIEMPO SUR)