Echaron de la policía, al detenido por violencia de género, Liceo Tachile.

Las Heras-, Fue a través del Boletín Oficial publicado esta jornada. Mediante un decreto, se resolvió que el agente incurrió en graves faltas al Código Disciplinario de la Policía.

A mediados de marzo del año pasado, un efectivo de la fuerza de seguridad provincial quedó detenido, tras haber sido denunciado por violencia de género y, a raíz de eso, fugarse al norte del país en busca de su impunidad y no ser alcanzado por el largo brazo de la Ley.

Se trata del caso de Liceo Tachile un agente que prestaba funciones en una de las comisarías de Las Heras y la denunciante es una joven oriunda de la provincia de Salta, con tiene hijos en común con el uniformado. Él también es originario de esa provincia norteña y había viajado junto a la chica en busca de un futuro mejor.

En Las Heras la mujer convivía con sus hijos y Tachile. El agente policial fue denunciado en varias oportunidades por violencia de género, pero la última fue la “gota que rebasó el vaso”. El uniformado fue acusado de golpear salvajemente a su pareja y amenazarla de muerte, situación que provocó el pedido de detención por parte de la Justicia, en febrero del año pasado. Según se pudo saber desde ese momento, Tachile podría estar escondido en alguna provincia del norte del país.

Finalmente, el cinco de marzo fue detenido en Oberá, Misiones, una localidad ubicada apenas a 100 kilómetros de la capital provincial y una semana después, fue trasladado a Santa Cruz para que finalmente comparezca ante la Justicia.

Esta semana hubo novedades sobre el caso de Tachile. Es que, según pudo saber La Opinión Austral, a través del Boletín Oficial N°5878, publicado este martes, se declaró cesante al acusado.

El decreto N°0156 fechado a fines de febrero de este año pero que vio la luz pública esta semana, fundamenta la decisión por haber cometido faltas graves al Régimen de Disciplina de la Policía. De esta manera y, tras la realización del sumario administrativo, Tachile queda al borde de dejar de ser expulsado de la fuerza de seguridad. (Nota: La Opinion Austral)