Provinciales-, No comparto el egoísmo del sector empresarial ni la falta de proyección nacional a los problemas estructurales que enfrenta el sector hidrocarburífero
Llegó la crisis y los ejecutivos de las empresas petroleras intentan cubrir sus pérdidas, ajustando como siempre a los trabajadores. No esperan una señal del Gobierno, ni se sientan a buscar opciones con los gremios para afrontar los problemas. Mucho menos arriesgan ellos algún capital que permita proteger la actividad hasta que mejore la situación. Simplemente plantean, como de costumbre, la reducción de los salarios, la suspensión de trabajadores y los despidos masivos. Argentina arrastra una crisis energética desde hace años. Caracterizada por la falta de inversión, el incremento del consumo y la falta de almacenamiento.
Las respuestas a los problemas siempre han sido oportunistas y cortoplacistas, principalmente con la importación de petróleo y gas, así como también a través del incremento de los subsidios. La energía es un elemento esencial en el desarrollo económico y social del país, debe ser atendida por las autoridades de otra manera. Mientras no definamos objetivos, metas y proyectos sustentables de inversión, no encontraremos una salida verdadera. Esta crisis vuelve a poner una vez más en evidencia los grandes problemas estructurales que existen en el sector petrolero.
Nadie niega que el contexto mundial es realmente complicado. Vivimos un presente para el que nadie estaba preparado. El mundo entero se paralizó y está buscando las mejores políticas y medidas para salir. Seamos claros, la crisis que generó la pandemia del Covid-19 no tiene precedente. Ya hay más de 2.3 millones de casos positivos en el planeta y más de 160 mil muertos. La OPEP estima en 6.8 millones de barriles diarios la baja actual de la demanda global de petróleo; adelantando que en el segundo trimestre de 2020 puede llegar a un exceso de 14.7 millones de barriles diarios. El FMI prevé que el PBI mundial se contraerá al menos un 3% en 2020 por el impacto del Coronavirus. El impacto social y económico que eso provocará será muy grande y nos va a llevar bastante tiempo volver a la normalidad.
Ahora, eso no quita que las empresas petroleras han ganado millones de pesos en los últimos cuatro años. Esto que digo puede leerse en innumerables notas periodísticas (comparto algunas al pie del texto), en informes oficiales y datos presentados por el ex secretario de Energía Gustavo Lopetegui. Entre 2015 y 2019 el conjunto de la industria petrolera tuvo un saldo neto a favor de u$s 8.300 millones. Es más, la mayoría de los grandes grupos que se disputan el mercado energético y de hidrocarburos en la Argentina acumularon tan sólo en 2019 una ganancia conjunta por más de $ 50.000. Por ejemplo, el holding de Marcelo Mindlin, obtuvo un resultado operativo de más de $ 31.000 millones. La petrolera creada por Miguel Galuccio obtuvo más de $8.000 millones. Lo siguió la familia Bulgheroni, con $ 5.921 millones y la compañía propiedad de la familia Rocca informó ganancias por más de $ 2.800 millones a través de Tecpetrol. En tanto que la petrolera de Eduardo Eurnekian reportó ganancias por $ 1.361 millones. Y la lista sigue.
Y si bien YPF, la principal operadora del país con algo más del 50% del mercado, tuvo un resultado con pérdidas en 2019, hay que decir que, si no se calcula el resultado del revaluo de los activos de gas, el año pasado terminó ganando más de $ 8.000 millones. Y en 2018, según sus balances, tuvo ganancias netas por $ 38.606 millones, lo que representó un aumento de un 204,7% comparado al volumen registrado en 2017.
No olvidemos también que el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) oficializó en noviembre de 2019 la compensación por $ 24.524,7 millones a las productoras de gas por la devaluación de 2018. Por lo que lo que se contabilizó como pérdida en un comienzo, será compensado en cuotas durante algunos años. El total de subsidios a la energía en 2019 fue de u$s 5.954 millones
En resumen, lo que podemos ver en la actualidad es a un grupo de empresarios petroleros que en esta crisis ven una nueva oportunidad de reproducir negocios y millones, explotando las falencias del sistema. Con la pandemia las cosas han cambiado, pero en los vínculos, claramente hay un incorrecto «sentido común» empresarial que continúa.
Tenemos una paritaria vencida. Nos están debiendo el aumento generado por el proceso inflacionario de los meses de enero, febrero y marzo. Al trabajador petrolero le van a estar adeudando arriba de un 20% del salario.
¡LLAMEN A PARITARIAS DE FORMA URGENTE!
Notas mencionadas en este texto:
https://www.iprofesional.com/…/303830-campo-gas-local-Por-q…
https://www.cronista.com/…/Tras-perder-us-1600-millones-las…
https://www.cronista.com/…/Distribuidoras-de-gas-recibiran-…